EL SÚPERAMOR

Con el nacimiento de cada uno de mis cuatro hijos es como si mi persona hubiera renacido otras cuatro veces. La llegada de cada uno de ellos me ha transformado, ha cambiado mi forma de ser, la manera que tenía de ver la vida en cada uno de esos momentos. Pero, sobre todo, han cambiado mi forma de sentir el AMOR.

No hay amor más incondicional que el que se puede sentir por un hijo. Hablo desde mi experiencia personal, por supuesto. Se trata de un nuevo sentimiento que nace desde lo más profundo de tu ser y te invade hasta el más recóndito de tus huecos. Sí, hasta esos que ni si quiera sabías que existía porque la fuerza del amor hacia un hijo nace y te inunda tan profundo que te 're-descubres'. 

Dicen que hasta que no tienes un hijo, no eres capaz de saber lo que se siente. Yo no sé si será verdad o no. Lo único que sé es que se trata de un sentimiento al que habría que buscarle una nueva y exclusiva palabra para él, porque la palabra amor es demasiado genérica. Estamos hablando de algo más allá del amor. Estamos hablando de un SÚPERAMOR. ¡Esta sería la palabra! 

El SÚPERAMOR es un sentimiento tan poderoso que te permite conseguir aquello que jamás creíste que lograrías. Algo que te llena tanto que puede que hasta te desborde y en algún momento que otro necesites gritar pidiendo ayuda para compartir tanta intensidad. 

Otras veces, el SÚPERAMOR hace que tengas súper poderes como el de quererles bajo cualquier situación y circunstancia, el súper poder de sacar fuerza donde ya no la hay para llevarles esa tarde al parque cuando en realidad estás agotada, de mal humor y necesitas descansar.

Pero, ¿sabéis qué? Que luego miras esas caritas disfrutando, riendo, llamándote 'mami, mami'.... que da igual todo porque en realidad lo tienes todo. 

En el fondo ser padres es ser unos súper héroes, por todo lo que hacemos, lo que sentimos, pero sobre todo porque tenemos el poder de dar vida y nuestro deber es cuidar de esas vidas para siempre. Madre mía, qué responsabilidad... pero qué responsabilidad tan bonita.